Si besando a otros nos besamos

Si cuando hablo de ti todas las palabras parecen desdibujadas, un intento inútil por alcanzar lo que esta mas allá de cualquier significado. Si la palabra amor no es mas que un triste reflejo de aquello que quiere expresar. Si felicidad es insuficiente y suena triste comparado con lo que ocurre cuando estoy contigo. Si todos los poemas donde te busco me parecen pobres y frívolos. Si un géiser de lágrimas de alegría anega mis males si noto tus labios.Si puedes pensar por mi sin equivocarte un ápice. Si estando tan lejos te oigo respirar. Si la lluvia brilla cuando te espero. Si ya no tengo miedo de que me faltes. Si se que mi ultimo aliento sera para ti. Si estar en ti lo es todo. Si estar sin ti también. Si reír es mirarte. Si volar es que me mires. Si sufrir es vago recuerdo. Si amar es oler tu pelo. Si la magia es simplemente desnudarte. Si besando a otros nos besamos. Si no puedo quitarme esta sonrisa de idiota... como explicamos a los demás que ha terminado.

Jodeté y baila

A veces pasa y da igual lo que grites.

Disfraces

Ahora, colgando en esa silla,
el viejo disfraz
muestra las marcas de las mentiras,
los restos de una conciencia sobrecargada,
el cansancio de soportar todas las triquiñuelas
que mantienen la realidad girando alrededor,
el miedo del comediante a mirar a la verdad sin su careta.
Las manchas del maquillaje,
lágrimas y sangre,
derramadas en un frenesí de alharacas fingidas,
retornan ahora en la tranquilidad a su ser,
pasando inadvertidas
a aquellos que pasean la ojos sin ver.
Los zapatos, boca abajo,
lucen amargas sonrisas en sus suelas rotas,
agotados de pisar suelos de arena suelta
y piedras afiladas,
de bailar la danza vertiginosa
que oculta la apatía y la tristeza.
Ahora, no me lo pondría más.
Pero mañana hay función.
Así pues, señoras y caballeros:
pasen y vean.
Y por supuesto,
no olviden su disfraz.

Noblesse obligue

Si no te robo una sonrisa
he perdido un día,
otro mas,
como cuando nadie esta cerca.
Dejo mis diatribas a la deriva
si tu no las escuchas,
perdidas en la cacofonía
de esta urgencia atropellada
que llamamos mundo.
Buscan a alguien capaz de descifrarlas,
de acompañarlas un trecho,
de guiarlas a un nuevo destino,
de hacerlas ciertas,
de darlas descanso,
de llevarlas a ese lugar
donde se ve tu interior:
el brillo de tu justa indignación,
tu fresca rebeldía,
tu ausencia de rencor vacuo
que me reconcilia con mis pulsiones.
Pobre gratitud te ofrezco
por todo lo que me das
quisiera ser poeta,
poder hacerte inmortal,
lanzando feroz un grito
de eterna verdad y fuerza
sepan lo que yo sé
aquellos que desgraciados
aún no te conocen.

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